Proyecto «animal espacio tiempo»

animal espacio tiempo
2022, instalación audiovisual. Chus Domínguez, Violeta Alegre, Nilo Gallego y Belén Sola.

Aunque no se trata de un proyecto específico del LAAV_, ha participado el equipo del mismo y se ha trabajado en gran parte desde los enfoques que plantea el laboratorio.

animal espacio tiempo, instalación en Sala Provincia, Instituto Leonés de Cultura, León, 10 marzo -15 de mayo. Exposición “Convocatoria Artes Plásticas ILC 2020”.

animal espacio tiempo plantea un acercamiento al pastoreo extensivo, tratando de aprehender una forma más que humana de estar y ser en el mundo, tanto en lo referente a la experiencia del tiempo y el espacio como a la relación que establecen entre sí todos los elementos, vivos e inertes, del entramado pastoril. El proyecto se ha realizado a partir del acompañamiento de la trasterminancia de un rebaño de ovejas merinas desde la ribera del Órbigo hasta las montañas de Luna.

El recorrido expositivo está marcado por una sucesión de caracteres alfanuméricos que actúan como ambiguas huellas que relacionan las piezas generadas en el proyecto: el vídeo homónimo animal espacio tiempo (51 min.), una selección de mensajes intercambiados por las integrantes del colectivo Ganaderas en Red, al que pertenece la pastora Violeta Alegre, una serie de capturas de vídeo, una composición sonora realizada a partir de las grabaciones de campo y una selección de las conversaciones mantenidas por el equipo en el transcurso del proyecto, cuyo registro forma parte de una investigación sobre el proceso creativo.

Acceso a la investigación sobre el proceso creativo clicando aquí.

 


Primera reunión del equipo, San Pelayo, 6 diciembre 2020.


Grabación, Puerto de Foyo del Agua, 21 julio 2021.


animal espacio tiempo, still.


animal espacio tiempo, captura de vídeo procesada.

Agradecimientos
Ganaderas en Red, Gregorio Fidalgo, Félix García, Fundación Entretantos, Manuel Rodríguez Pascual, Alité Serantes.

Obra desarrollada gracias a un ayuda para la realización de proyectos artísticos del Instituto Leonés de Cultura.

PROYECTO

El pastoreo como actividad tradicional y como actividad contemporánea.

El pastoreo extensivo como actividad tradicional está sufriendo una drástica reducción, aunque todavía se conserva en gran parte del planeta (lo practican 500 millones de personas en todo el mundo[1]). En la provincia de León la trasterminancia centra este tipo de actividad y representa un movimiento económicamente importante que supone el trasiego de varios miles de ovejas. Aunque es una ocupación que se sigue desarrollando en intenso contacto con la naturaleza, se ha ido adaptando a los tiempos y a la utilización de las tecnologías, en cuanto al transporte, las construcciones para ganado y pastores, la mecanización de la actividad agropecuaria, la atención veterinaria, etc., tecnología que a través de los teléfonos móviles también ha transformado el día a día de los pastores y pastoras. Esta forma de pastoreo adaptado a los tiempos es sobre la que queremos incidir en nuestro trabajo, ya que creemos que la única posibilidad de superviviencia del pastoreo está relacionada con la introducción de mejoras en las condiciones de vida de la comunidad pastoril. De alguna forma tratamos de huir de la épica que conllevan la mayoría de las representaciones sobre el mundo pastoril, de referirnos a “la actividad de los últimos pastores…” o “la última forma de trashumancia…” y proponemos mirar y escuchar planteando una línea directa desde el presente hacia el futuro.

No hay duda de que este tipo de ganadería ofrece unas ventajas esenciales cuya descripción supera el propósito de estas líneas. Entre ellas estaría el aprovechamiento sostenible de los recursos que ofrecen las riberas y los montes de nuestra geografía a la vez que salvaguarda la riqueza natural favoreciendo la biodiversidad, protegiendo contra los incendios o reduciendo la emisión de CO2 del suelo. En este sentido, la decadencia del pastoralismo está provocando problemas específicos referidos a la pérdida de la cultura inmaterial, de paisajes, sistemas de aprovechamiento y producción, etc.

Pero nuestro proyecto no pretende ser un trabajo divulgativo sobre la importancia de la ganadería extensiva, sino que plantea un acercamiento a dos cuestiones que los estudios “utilitarios” dejan de lado: por un lado conocer una parte esencial del ser humano que está desapareciendo con la extinción del pastoreo, y por otra plantear la importancia de una aproximación interespecies alejada del antropocentrismo, es decir, tratar de equilibrar la importancia que se da a todos los elementos de la comunidad que interviene en la actividad pastoril.

La dimensión espacial y temporal del pastoreo.

Cuando hablamos de “conocer una parte esencial del ser humano que está desapareciendo con la extinción del pastoreo” nos referimos por un lado a una forma de vida desarrollada en intenso contacto con la naturaleza y muy dependiente de esta, de su conocimiento y conservación, pero también de una relación muy especial con el espacio y el tiempo, ya que la ganadería extensiva, y sobre todo las variantes trashumantes y trasterminantes, requieren un constante movimiento y largas jornadas para su desarrollo. El desplazamiento a través del espacio y el tiempo de los rebaños nos pone en conexión con esa dimensión nómada, migrante, que es consustancial a la especie humana y a muchas especies animales. Y, por otro lado, precisamente espacio y tiempo son dos componentes esenciales del audiovisual. Como escribe el cineasta y antropólogo David MacDougall[2] el cine observacional se fundó en la presunción de que las cosas que ocurren en el mundo merecen ser observadas, y que su propia configuración espacial y temporal distintiva es parte de lo que es valioso observar sobre ellas.

Enfoque interespecies.

Dentro de la actividad pastoril consideramos esencial atender a una comunidad compleja y fuertemente interrelacionada, no solo los pastores y pastoras, sino también los animales que conforman el rebaño (ganado, perros de carea, perros de defensa) así como las numerosas plantas y los elementos físicos con las que el rebaño interacciona.

Atender a la importancia de esta comunidad supone pasar de una visión antropocéntrica a una interespecies. En este enfoque se plantean las relaciones entre humanos y no humanos, y estos son considerados como agentes que participan en los procesos culturales. Cómo prestar atención a la otredad significativa[3] que suponen las ovejas, los perros, las plantas, etc., y hacerlo desde una mirada y escucha no productivistas y que den cuenta de siglos de co-evolución y de domesticación, como un proceso emergente de cohabitación que involucra agencias de muchos tipos[4]. Se trataría, como propone el antropólogo Eduardo Kohn, de intentar salir del “autismo cosmológico” que nos condena a una incomunicabilidad crónica fuera de nuestra especie, y en el que tanto el mundo como sus criaturas son percibidos como “meros objetos sin realidad subjetiva propia”[5]. En este sentido, ¿quiénes nos pueden ayudar a superar esta incomunicabilidad mejor que las propios pastoras?

En el desafiante proyecto artístico de Laura Gustafsson y Terike Haapoja alrededor del ganado bovino se puede leer que el autismo ontológico –la condición de percibir el mundo y sus criaturas como meros objetos sin una realidad interna subjetiva– puede ser diagnosticado como la condición humana que ha prevalecido desde la revolución agrícola, que trivializó nuestra necesidad de la interacción recíproca con la naturaleza y nuestras criaturas compañeras. Si percibimos nuestra realidad circundante como nada más que un recurso explotable, ¿por qué molestarse en hacer cualquier esfuerzo por comprender cómo se sentirán los demás, mucho menos en lo referido al ganado como sujetos intencionales? Aprovechando el arte para identificar imaginativamente y empatizar con animales podría ofrecer una ruta de escape de nuestra condición actual de autismo[6]. De alguna manera, en su devenir constante, los rebaños  han conservado otra forma de estar en el mundo, y desde el arte  podemos tratar de acceder a representar un aspecto esencial de la condición animal y humana.

Autoría compartida.

El proyecto Animal Espacio Tiempo se plantea como una investigación y una creación asociada que requiere la co-participación de un responsable de imagen (Chus Domínguez), un responsable de sonido (Nilo Gallego) y una responsable de la investigación artística (Belén Sola). Pero consideramos que además el proyecto ha de impregnarse en su estructura y contenidos por esos otros mundos sobre los que se quiere reflexionar, por lo que se ha consideramos como esencial incluir en la autoría a la responsable del manejo del rebaño.

Durante la investigación previa hemos decidido centrarnos en la ganadería de una pastora, Violeta Alegre, porque creemos que de alguna manera su trayectoria representa otra forma de acercarse a la representación del pastoreo. Por un lado se trata de una mujer, cuando casi todas los trabajos sobre el pastoreo se centran en los hombres. Ha llegado al pastoreo no por tradición familiar sino a partir de un aprendizaje llevado a cabo ya en la vida adulta, lo que de nuevo choca con la imagen tópica del pastor cuya vida estaba marcada si no en los genes sí en la transmisión cultural de padres a hijos. Por último, se trata de una persona muy activa en la generación de redes entre ganaderas, siendo una de las responsables de las redes sociales de la asociación Ganaderas en red, que reúne a mujeres de todo el país, lo que de nuevo rompe con un estereotipo del pastor aislado en su mundo y ajeno a las tecnologías del presente. Y, por último, se trata de una ganadera trasterminante, que en colaboración con su marido mueve su ganado a través de varias comarcas de la provincia de León, por lo que a nivel espacial nos permite atender a su actividad en diferentes territorios a lo largo del año.

[1] Pastoralismo y economía verde: ¿un nexo natural?, Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), 2015.

[2] David MacDougall, De quién es la historia, 1995.

[3] Donna Haraway, Manifiesto de las especies de compañía, 2016.

[4] Donna Haraway, 2016.

[5] María Ptqk, Especies del Chthuluceno, 2019.

[6] Laura Gustafsson, Terike Haapoja, History according to cattle, 2015.


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